Desde la Federación Económica de Mendoza y sus Cámaras Asociadas observamos con preocupación la situación de la gastronomía y el turismo. Este sector, sin dudas, ha sido el más golpeado por el confinamiento y la restricción de circulación.
En las últimas semanas, impulsada por el Gobierno de la Provincia, se comenzó una estrategia tendiente a promover el turismo interno, decisión que mostró una pequeña reactivación para este sector.
En este contexto, los departamentos de San Rafael, Malargüe, Tunuyán, Santa Rosa y Lavalle, en uso de sus facultades solicitaron al Gobernador la restricción de circulación de turistas por estos departamentos, por considerarlos un factor de riesgo.
Desde la Federación Económica entendemos que transitamos una etapa del día a día, en donde se debe mantener una permanente observancia del estado epidemiológico, que puede generar marcha y contra marcha.
Al día de la fecha y a más de 30 días de haberse habilitado la circulación con fines Turísticos y Gastronómicos, no existen fundamentos concluyentes que permitan justificar que esta actividad genera más riesgo que otras como el Comercio y la Industria. Asimismo, al día de la fecha no se registra ningún infectado procedente de esta actividad.
La inhabilitación de esta actividad afecta a emprendimientos pequeños, medianos y los más grandes. Son los emprendimientos más pequeños, y los comercios asociados a esta actividad los más afectados.
Desde la Federación Económica, instamos al Gobernador de la Provincia y por su Intermedio cada una de las Intendencias, a instrumentar todas las medidas de control necesarias para reactivar esta actividad económica.
Asimismo, instamos a los referentes positivos a evitar la politización que pone a unos sectores de la sociedad en contra de una actividad económica noble. Solicitamos mayor coordinación y articulación entre lo público y lo privado, de manera colaborativa encontrando en la moderación la mejor decisión para cada caso.
