La confianza de los empresarios pymes tuvo un leve incremento en junio, al subir 0,4% frente a mayo, aunque se encuentra un 9,4% por debajo en la comparación respecto al año anterior.
La recomposición mensual la explica el sector industrial, donde la confianza repuntó 1,3% impulsada por expectativas futuras más alentadoras que en mayo. En el comercio en cambio, la confianza se retrajo 0,2% frente a mayo, básicamente por una evaluación menos favorable sobre la situación presente que realizaron los empresarios consultados.
En la comparación interanual, frente a junio de 2022, la confianza de los industriales bajó 12,7% mientras que, en los comerciantes, resultó 7,2% inferior. El industrial hoy percibe un deterioro más fuerte en la situación que atraviesa su empresa frente a un año atrás, y eso explica la elevada tasa de caída.
Los datos surgen del Índice de Confianza Pyme (ICPyme) que elabora la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) para captar el ánimo del empresario en base a tres variables: la situación presente de su empresa, sus expectativas de evolución futura y sus intenciones de inversión.
Las pymes trabajaron en junio con niveles de confianza de 56,7 puntos, teniendo como referencia una escala de 0 a 100 (donde 0 es confianza nula y 100 confianza plena). Es decir, la brecha con nivel de confianza plena es de 43,3 puntos.
Análisis sectorial
Percepción sobre la situación presente: la percepción de la situación presente bajó 1,0% mensual en la industria y se retrajo 4,5% en el comercio. En la comparación interanual, la percepción de la industria fue 22,3% menor que en junio 2022 y la del comercio se ubicó 8,5% por debajo de ese mes. Si bien la actividad industrial aún crece, se observan signos de desaceleración entre los cuales se encuentran las dificultades que generan la compra de insumos importados y la dinámica inflacionaria.
Expectativas futuras: Las expectativas tuvieron un pequeño incremento mensual tanto en el comercio (+4,1%) como en la industria (+3,2%). En la medida que se van conociendo los candidatos presidenciales, las empresas van despejando algunas dudas. Sin embargo, en los dos sectores las expectativas resultaron menores respecto a 2022: cayeron 8,7% en la industria y 8,4% en el comercio.
Intenciones de inversión: En junio, las intenciones de inversión tuvieron una mejora mensual de 2,1% en la industria y se mantuvieron sin cambios en el comercio. Pero en los dos sectores se ubicaron por debajo del mismo mes del año pasado (-3,3% en la industria y -4,4% en el comercio). Este sub indicador apenas llega a 51 puntos en la industria y a 49,7 puntos en el comercio. Si bien las empresas invierten para seguir creciendo y mejorando su competitividad, ese proceso se percibe afectado por las dificultades de estimar costos, precios y rentabilidad a mediano plazo de los proyectos planteados.