Ante la información que trascendió referida a que la Secretaría de Energía eliminará a partir de este mes de marzo un subsidio a la electricidad de grandes industrias y comercios de todo el país, la Federación Económica de Mendoza (FEM), expresa su preocupación por el impacto directo que tendrá en las Pymes de la provincia.
Según lo que se conoce, el objetivo sería para generar ahorro fiscal. Ya se habla de aumentos en las boletas de entre 35% y 50%.
Queremos dejar en claro que respaldamos todo lo referido a ahorros por parte del Estado. Sin embargo, creemos que no es oportuno aplicar medidas que afecten la estabilidad del sector productivo, sobre todo cuando se está atravesando una pandemia cuyo fin aún no se visibiliza con certeza por más que esté la vacuna. En Mendoza hay sectores que todavía no se recuperan, por lo que más suba de costos será letal para muchos.
En este sentido coincidimos además con lo expresado recientemente en declaraciones a la prensa por Alfredo González, secretario gremial de CAME, que señaló: “Estos aumentos van a repercutir de manera indirecta y también se verá reflejado en la inflación. Este tipo de aumentos impactará en el precio final de los productos”.
Por ello desde la FEM solicitamos que si hay algún incremento tarifario este sea segmentado. El Gobierno tiene que tener en cuenta los diferentes sectores del país y el precio de la energía en ellos para segmentar los aumentos. Caso contrario el golpe será muy grande para Pymes, comercios y sector productivo mendocino.